¿Un BMW con el corazón de un Mercedes? Puede que mucha gente acabe enfadada, pero eso no ha importato a MGarage Motorsport, que ha mostrado sus avances con esta quimera.
MGarage MotorsportInstagram
El BMW Z3 es un cupé y roadster encantador que, de fábrica, nunca vino con un motor V8. Eso no impidió que este taller en Polonia colocara uno cuidadosamente en el compartimento del motor de un Z3 para pruebas de drift. La cosa es que el V8 elegido no era uno construido precisamente por BMW.
Un V8 gigante instalado casi a la fuerza en un coche más pequeño
Según Engine Swap Depot, el V8 funciona con una ECU Emu Black y envía potencia a las ruedas a través de una transmisión ZF de ocho velocidades gracias a un adaptador del mercado de accesorios y un controlador de transmisión independiente. El video publicado a Instagram del coche en el banco de pruebas es previsiblemente ruidoso:
Normalmente encontrarías este V8, con el nombre en código M113K, en modelos como el SL55 AMG, E55 AMG y G55 AMG. Esos coches tienen mucho más espacio en el compartimiento del motor, mientras que el V8 parece haber ocupado todo el espacio disponible (y más) debajo del capó de este Z3. El motor genera entre 469 y 574 CV de fábrica, pero MGarage no especifica si todavía ofrece esas cifras. Personalmente, creo que eso es suficiente para un automóvil tan pequeño como un Z3, incluso en forma coche de drift.
Vía: Road & Track
Brian Silvestro Road & Track staff writer with a taste for high-mileage, rusted-out projects and amateur endurance racing. Antonio Ramos Ochoa Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver.