Un Maserati modelo Ghibli como el que adquirió la pareja de Ayuso
Alberto González, la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, adquirió en 2021 un vehículo de lujo de la marca italiana Maserati, modelo Ghibli, valorado como mínimo en 83.000 euros, según datos de la Dirección General de Tráfico a los que ha accedido la SER.
El coche, comprado cuando González y Ayuso ya eran pareja y cuando Alberto ya había obtenido los beneficios por los que ha sido denunciado por la Agencia Tributaria, figura a nombre de la empresa Maxwell Cremona.
Esta sociedad, según la denuncia de la Agencia Tributaria que ha judicializado la fiscalía, fue la empresa utilizada por Alberto González para emitir facturas falsas con las que camuflar el beneficio obtenido con las comisiones por intermediación sanitaria en lo peor de la pandemia.
Deudas por impuestos y multas al Ayuntamiento de Madrid
La pareja de Ayuso no paga al Ayuntamiento de Madrid los impuestos del Maserati y adeuda 6 multas de tráfico, según datos oficiales del Consistorio a los que ha accedido la SER.
En concreto, Alberto González adeuda el impuesto de vehículos de tracción mecánica del Ayuntamiento de Madrid por las anualidades de 2022 y 2023, por un total de 563.65 euros.
Además, según los mismos datos oficiales, el novio de Ayuso adeuda 6 multas de tráfico al Consistorio por un total de 425.32 euros. Infracciones cometidas entre los años 2022 y 2023.
El Maserati en el garaje de la vivienda de la pareja
Alberto González aparca el Maserati en una amplia plaza de garaje, adquirida el 27 de julio de 2021 según el registro de la propiedad. El mismo día y en idéntica ubicación del barrio de Chamberí en el que compró el lujoso piso de 183 metros cuadrados en el que vive junto a Isabel Díaz Ayuso. No son pocos los precedentes de investigados por supuesto fraude que destinan sus beneficios a la adquisición de vehículos de lujo. Recientemente el conseguidor Víctor de Aldama en el caso Koldo, Alberto Luceño en el caso de las mascarillas de Madrid, o el senador del PP, Jesús Sepúlveda, quien guardaba un Jaguar en el garaje, que nunca vio su mujer, la exministra Ana Mato.
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