- El actual CEO de Mercedes-Benz, Ola Källenius, apuesta por un libre mercado con menos aranceles o incluso sin ellos
- Mercedes-Benz apuesta por la liberalización del mercado
- Igualdad de condiciones: la solución según Mercedes
El actual CEO de Mercedes-Benz, Ola Källenius, apuesta por un libre mercado con menos aranceles o incluso sin ellos
En una reciente entrevista con Financial Times, Ola Källenius, CEO de Mercedes-Benz, ha manifestado su firme oposición a la potencial imposición de aranceles por parte de la Unión Europea a los vehículos eléctricos procedentes de China. Källenius aboga por un mercado internacional abierto y sin obstáculos económicos que frenen el progreso, una postura que distingue a la compañía alemana de la opinión predominante entre muchos líderes europeos y directivos de la industria automotriz.
Mercedes-Benz apuesta por la liberalización del mercado
Källenius enfatiza la necesidad de reducir o eliminar las barreras arancelarias existentes en lugar de incrementarlas. Argumenta que enfrentar la competencia con productos superiores, tecnología avanzada y mayor flexibilidad es el camino a seguir. Resalta además que Mercedes-Benz no solicita protección arancelaria y cree que las principales empresas chinas tampoco desean tal medida, prefiriendo competir en igualdad de condiciones a nivel global.
El ejecutivo de Mercedes señala que la apertura comercial ha sido un motor de crecimiento económico, especialmente en China, donde ha contribuido a mejorar significativamente el nivel de vida de cientos de millones de personas. Desde su perspectiva, el proteccionismo no es una estrategia viable a largo plazo.
Igualdad de condiciones: la solución según Mercedes
Mercedes-Benz no es la única marca automovilística europea que se posiciona en contra de la imposición de aranceles. Porsche también ha expresado su apoyo a la competencia china y su oposición a cualquier tarifa que la Unión Europea pudiera implementar. Ambas empresas, con una sólida presencia en el mercado chino, tienen motivos evidentes para defender la libre competencia.
Hasta la fecha, la Unión Europea no ha establecido aranceles específicos contra vehículos eléctricos chinos, aunque algunos países, como Francia, han mostrado una tendencia hacia el apoyo de la industria automotriz local mediante incentivos para la compra de vehículos eléctricos producidos dentro de Europa, en contraste con la posición hacia los importados de China.