Más vale tarde que nunca. Eso es lo que pensarán muchos de los clientes de Stellantis al ver que el gigante automovilístico acaba de ofrecer una solución para el problemón con el motor PureTech que utilizan muchos modelos del grupo.
Existe la posibilidad de que este motor tricilíndrico de gasolina Puretech presente dos fallos: desgaste prematuro de la correa de distribución húmeda y excesivo consumo de aceite.
Garantía extendida con carácter retroactivo, siempre que se cumplan dos condiciones
Stellantis pone dos condiciones para que se aplique esta garantía extendida en caso de accidente. La primera de ellas es “que el mantenimiento se haya realizado de acuerdo con el plan de mantenimiento recomendado por el fabricante, con cualquier profesional de la automoción”.
Esto significa que es necesario haber llevado a cabo el mantenimiento estipulado, con independencia de que se realice en la red oficial o en un taller ajeno a la red, de acuerdo a lo que estipula la ley en Europa. La factura de esos mantenimientos sirve como comprobante.
Hay que tener en cuenta que este motor comenzó a fabricarse hace más de 10 años y que ha llegado al mercado en varias variantes, tanto atmosféricas como turboalimentadas. Lo han utilizado multitud de modelos de varias marcas del grupo Stellantis y sigue en producción, pero ahora con una correa de distribución reforzada que evita el posible fallo relacionado con esta pieza.
Recientemente ha llegado al mercado una nueva variante del 1.2 Puretech de Stellantis, esta vez con hibridación ligera, pero esta versión cuenta con cadena de distribución y no con correa de distribución.
La respuesta de Stellantis llega tarde, pero, evidentemente es mejor que nada. Con este movimiento, el grupo pretende dos cosas: dar soluciones y tratar de quitarse la mala fama por culpa de esta cuestión.
Es una decisión importante porque la garantía extendida de 10 años o 175.000 kilómetros se aplica a cualquier coche que utilice este motor Puretech, sea cual sea la marca de Stellantis.
Por supuesto, la garantía tiene carácter retroactivo, es decir, que si un coche con este motor que se vendió en el año 2015 presenta un incidente, la garantía extendida se hace cargo de todo. Y será así hasta el año 2025 o hasta que esa unidad llegue a los 175.000 kilómetros, lo que antes suceda, siempre que se cumplan las dos condiciones de Stellantis para aplicar esta cobertura.
Eso sí, Stellantis pone una fecha límite y aclara que la garantía extendida solo cubre los vehículos producidos hasta el 20 de junio de 2022. “Para vehículos fabricados antes de esta fecha: en caso de incidente, debe registrarse durante el período comprendido entre el inicio de la garantía contractual (información disponible en la red autorizada) hasta el final del período de extensión de la garantía”, aclaran desde Stellantis a Motorpasión.
Según ha explicado Stellantis a Motorpasión, también está trabajando en dar una solución a los clientes que han tenido que afrontar la reparación de su coche antes del anuncio de esta garantía extendida: “Actualmente estamos trabajando en ese punto. Actualizaremos esta información en abril”.
Obviamente, es injusto para estos clientes haber tenido que pagar por algo que ahora cubre Stellantis (si se cumplen todas las condiciones), así que el mes que viene deberíamos conocer la respuesta que les ofrece Stellantis.