El BMW X2 es la variante con aspecto coupé del BMW X1. Ya está a la venta con dos motores diésel y dos de gasolina. Hay dos versiones eléctricas denominadas iX2
El BMW X2 es un SUV de cinco puertas y 4,55 metros de largo que rivaliza directamente con el Audi Q3 Sportback. Hay otras alternativas como el Mercedes GLA o el Volvo XC40, pero por su diseño son más rivales del BMW X1 que del X2.
El BMW X2, básicamente, es el mismo coche que el BMW X1, salvo por el diseño y por algunas leves variaciones técnicas (como que el X2 emplea un ancho de vías 8 mm mayor que el del X1). También ofrece menos versiones, al menos e momento: el BMW X1 cuenta con una versión sDrive18i de 136 CV y dos híbridas enchufables de 245 y 326 CV que no están disponibles en el X2.
Versión | Tipo de motor | Tracción | Etiqueta DGT | Potencia | Precio |
BMW X2 sDrive18d | Diésel | Delantera | C | 150 CV | 45.600 euros |
BMW X2 xDrive20d | Diésel, microhibridado | Total | Eco | 163 CV | 49.200 euros |
BMW X2 sDrive20i | Gasolina, microhibridado | Delantera | Eco | 170 CV | 47.100 euros |
BMW X2 M35i xDrive | Gasolina | Total | C | 300 CV | 71.800 euros |
BMW iX2 eDrive20 | Eléctrico | Delantera | Cero | 204 CV | 50.500 euros |
BMW iX2 xDrive30 | Eléctrico | Total | Cero | 313 CV | 58.000 euros |
Así es por dentro
Por dentro, las diferencias entre el BMW X2 y el BMW X1 son mínimas cuando hablamos del puesto de conducción: muy buena calidad tanto por los materiales como por la iluminación ambiental, buena insonorización y un puesto de conducción más bien elevado en el que no se tarda demasiado en dar con la postura ideal de conducción.
Sigue sin convencernos la nueva política de BMW en lo que respecta a sus pantallas. La central aglutina infinidad de funciones. Seguimos dudando que el dueño del coche llegue a utilizar en toda su vida más del 25-30% de lo que ahí hay.
Sin embargo, sí utilizará constantemente el climatizador, el equipo de audio buscará como un loco la forma de desconectar los sistemas de ayuda a la conducción, que son tan pesados como en todas las marcas por normativa europea.
Por espacio, las plazas traseras ofrecen buen espacio para dos adultos, pero no están especialmente pesados para que tres personas viajen a sus anchas. No es un problema de espacio como tal, sino que la forma del asiento en su zona central o el túnel de transmisión limitan la comodidad de esa plaza central.
Si hablamos de maletero, nos encontramos con que el del BMX X2 es superior al del X1, cuando lo esperable sería justo lo contrario. Si el BMW X1 ofrece ya unos buenos 540 litros, en el BMW X2 nos vamos a los 560 litros.
En marcha
En esta ocasión, hemos tenido una breve toma de contacto con un BMW sDrive18d y con un BMW X2 M35i. A falta de realizar una prueba completa, y teniendo en cuenta cómo va el BMW X1 sDrive18d, (aquí tienes la prueba) podemos afirmar que las sensaciones al volante son muy similares entre ambos modelos, y no hay grandes diferencias en la puesta a punto. O, al menos, no eran especialmente perceptibles en esta primera toma de contacto.
El BMW X2 sDrive18d sigue siendo un coche cómodo, preciso, con unas reacciones inmediatas por parte del eje delantero y una trasera que se limita a controlar cualquier posible reacción extraña. El resultado es una gran sensación de control y seguridad, pero con un toque de agilidad que no es tan habitual entre los SUV’s de este tamaño.
En cuanto al motor, el sDrive18d es un diésel de 150 CV asociado a un cambio automático de siete marchas. Tiene tracción delantera. Es un motor más que suficiente para conducir con normalidad, y se defiende bien cuando se le exige un poco más, por ejemplo, en un adelantamiento. No va a ser un motor muy gastón: moverse entre 5,5 y 6 L/100 km va a ser lo habitual, y está muy bien.
Este motor no está microhibridado, así que tiene etiqueta C de la DGT. En abril, BMW pondrá a la venta el BMW X2 xDrive20d, que tendrá 163 CV, tracción total y etiqueta Eco de la DGT gracias a un sistema de microhibridación. Costará 3.600 euros más que el X1. Más que por prestaciones o por diferencia real del consumo, será interesante para quien necesite la etiqueta Eco o quiera tener tracción total.
Y el BMW X2 M35i…
En cuanto al BMW X2 M35i, lleva un motor 2.0 turbo de 300 CV con un cambio automático de siete marchas y tracción total. Las prestaciones son muy buenas (necesita sólo 5,4 segundos para pasar de 0 a 100 km/h), pero al volante su capacidad de aceleración no me ha impresionado tanto como esperaba, probablemente por sus 1.770 kilos de peso… y porque me tocó conducirlo subiendo un puerto de montaña.
Después, ya a velocidades más elevadas, y cuando ves que parece no alcanzar nunca su límite de velocidad, sí te das cuenta que estás a los mandos un M35i. Necesitamos también más kilómetros para confirmar estas primeras sensaciones.
Por comportamiento, lógicamente se aprecia con claridad una mayor agilidad y unas reacciones más directas e inmediatas que en el BMW X2 sDrive18d, pero no parece más difícil de conducir más allá de la diferencia de prestaciones.
Sí gustará por su sonido, especialmente cuando lo llevas en modo Sport, que es bastante notable (el ruido es real, pero además se ve amplificado por el sistema de audio) y bonito, si es que te gusta el típico sonido de escape ‘gordo’.