El futuro Tesla Model 2 podría optar por baterías CATL.
Más allá de sus innovadores procesos de producción y su plataforma un 50% más asequible, parte del secreto podría estar en la batería que monte el futuro coche eléctrico de Tesla. Y en esas, el gigante asiático CATL podría estar detrás y ser una de sus armas secretas para conseguir dichos objetivos.
Todo ello, además, en un nuevo contexto que se vive en Estados Unidos, donde el proteccionismo contra todo lo que provenga de fuera del país, especialmente desde China, se mira con lupa. CATL y Tesla ya trabajan juntos en los modelos que la marca vende en el país asiático, pero también para el Model 3 más básico producido en Estados Unidos, que cuenta con la batería LFP del gigante productor de baterías.
Cómo ‘sorteará’ CATL las medidas proteccionistas norteamericanas
Las últimas informaciones apuntan a que Tesla y CATL están llevando a cabo una nueva estrategia que podría extenderse en el futuro a más marcas. Se trata, básicamente, del alquiler de herramientas por parte del fabricante.
Es decir: CATL suministra herramientas para baterías que se instalan, en este caso, en la Gigafábrica de Tesla en Nevada. En vez de importar módulos de baterías o usar las materias primas obtenidas por el fabricante chino, en este caso es Tesla la que usa las herramientas ‘prestadas’ para producir baterías más avanzadas y, a la vez, a un precio más bajo.
CATL ha sido una de las marcas productoras chinas que más se ha visto afectada. Este nuevo enfoque desarrollado con Tesla podría ser un punto de partida para una nueva forma de negocio: « CATL está en conversaciones con otros 10 o 20 fabricantes de automóviles de EE.UU. y Europa sobre un acuerdo similar», afirmó Robin Zeng. Una fórmula que podría ayudar, además, a que los fabricantes de coches puedan acceder a baterías más avanzadas y baratas a un mismo tiempo.
No obstante, los legisladores norteamericanos siguen pidiendo revisiones para evitar situaciones como la que está sucediendo con sus países vecinos: los fabricantes chinos están intentando entrar en su territorio construyendo fábricas en países vecinos con acuerdos comerciales preferenciales, como México. ¿Podrá sortear CATL las restricciones gracias a esta nueva fórmula instaurada con Tesla?
«Llevamos mucho tiempo escribiendo sobre la necesidad de que Estados Unidos interactúe con la tecnologÃa china de vehÃculos eléctricos para impulsar una mayor penetración de los vehÃculos eléctricos. En nuestra opinión, esto requerirá un grado de ‘occidentalización’ de la tecnologÃa china para que sea aceptable en Estados Unidos, dado el creciente sentimiento proteccionista», reconoce Adam Jonas, director de investigación espacial y automotriz de Morgan Stanley, que ve en esta solución alternativa de Tesla como un avance para que las marcas chinas de baterÃas puedan llegar al mercado norteamericano con garantÃas.
Fuente | Automotive News Europe