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De todas las marcas de autos deportivos o súper autos que existen hoy en día, solo una se puede dar el lujo de ser la más deseada, y es que aquellas personas que no pueden pagar uno de sus modelos hacen lo posible para tener un sus manos algún auto a escala o camiseta que lleve su emblema.
Palabras hechas realidad
Para hacer realidad estas palabras, Porsche inició la fabricación de automóviles con su primer modelo: el 356, un modelo dotado de un diseño sencillo y una ingeniería perfecta, esto con el fin de lograr un vehículo atractivo sin importar que pasen los años y un desempeño que marcó época.
Aunque tenía solo 40 caballos de fuerza, debido a que montaba el mismo motor del Volkswagen Vocho, este primer modelo de Porsche no solo ofrecía un manejo ágil, sino también cómodo y confiable.
Desde luego, esta doctrina que llevó a Porsche a iniciar su historia de éxito después la impuso en un auto que es toda una leyenda vigente. Se trata del icónico 911 que al igual que su predecesor se distingue por desempeño, pero sobre todo por su imagen que lleva consigo un criterio que se sigue al pie de la letra en la mayoría de sus modelos: “El mayor logro es crear algo atemporal, algo que permanezca intacto ante el inevitable paso del tiempo”.
60 años del 911
Por más que el 911 evolucioné en cada una de sus generaciones, es un auto no hace uso de adornos excesivos para ganar la aceptación de sus compradores. Pero además de eso, la identidad propia es otro de sus grandes baluartes. Y una vez más es donde las palabras de sus fundadores fueron llevadas a la realidad: “Un Porsche siempre se verá como un Porsche”.
Ya sea un sedán, un biplaza o una camioneta, cada uno de los modelos de Porsche no pierden su esencia, y por más que hayan pasado 75 años, un siglo o los años que deban transcurrir de la creación de su primer modelo, todos guardan algo en común: seguir la tendencia de diseño, que los hace parecidos, mas no iguales.
Ahora bien, el hecho que Porsche tenga la filosofía de seguir sus orígenes, no quiere decir que no esté en la vanguardia en cuestión de tecnología. De hecho, es una de las marcas que más invierte en desarrollar innovaciones que permitan que sus autos logren la mejor dinámica de conducción y confort.
Pasado, presente y futuro
De igual manera, tiene todo listo para convertirse en la marca que más autos deportivos vende en el mundo. Sí, en Porsche se nació con la gasolina, pero es inevitable no evolucionar y estar al ritmo de la industria. Tan solo es como siguiera ofreciendo una radio con perillas en lugar de las pantallas táctiles que hoy equipa en sus modelos.
Como ha sido desde sus orígenes, una de las cosas que ha hecho que Porsche sea una marca de deseo, es la dinámica de conducción de sus modelos, que así como pueden ser unos autos de pista, lo mismo pueden ser para el día a día.
Esto se logra no solo con motores poderosos, sino con un elevado nivel de tecnología que comprende cada una de las piezas que conforman cada unos de sus modelos. Y una vez más una de las teorías de los fundadores de Porsche: “El buen diseño debe ser honesto, sin necesidad de adornos”.
Una muestra del alto desempeño logrado en la gama de Porsche se puede ver en el automovilismo. Desde sus inicios, el emblema de Stuttgart ha estado presente en las pistas demostrando la capacidad y fiabilidad de sus autos. Hasta la fecha, los automóviles Porsche han ganado unas 24,000 carreras automovilísticas en todo el mundo, incluidas más de 50 victorias en su clase en Le Mans. Esta cifra habla del porqué su nombre es todo un sinónimo de las carreras.
No por nada Carroll Shelby, la leyenda del automovilismo y de los muscle cars, mencionaba que “Gracias a Dios no hay carreras de 48 horas en ningún lugar del mundo, porque es probable que nadie pueda vencer a Porsche”.
