- Prueba CUPRA Ateca: qué diferencias tiene el TSI 190
- Prueba CUPRA Ateca: ¿son suficientes 190 CV?
- Los rivales del CUPRA Ateca 190
Nos ponemos a los mandos de la versión de acceso del SUV. ¿Conseguirá la misma deportividad? ¿Tienen muchas diferencias? Lo analizamos aquí.
El CUPRA Ateca siempre tendrá el honor de haber sido el primer modelo de la incipiente marca española. El “problema” que tenía es que sólo se ofrecía con un motor TSI de 300 CV, que por su coste quizás pudiera espantar a posibles compradores, pese a su buena relación precio/prestaciones. Esto se solucionó el pasado verano cuando heredó del SEAT Ateca el TSI de 190 CV, una opción más comedida. Pero, ¿mantendrá el mismo espíritu deportivo que la versión inicial?
Prueba CUPRA Ateca: qué diferencias tiene el TSI 190
Para el CUPRA Ateca no se ha hecho una gama de equipamientos al uso. Digamos que cada motor lleva una dotación única, que se puede mejorar con una serie de paquetes opcionales. Y quizás por esto las diferencias entre ambos sean mínimas, como demuestra que en el exterior tanto solo se distingan porque el más potente lleva las cuatro salidas de escape visibles, detalle que en nuestra unidad de pruebas queda totalmente oculto. Una pena. También en el TSI 300 se pintan las pinzas de freno en negro, se añaden los logos VZ, que identifican a los CUPRA más potentes.
El resto de elementos que tiene a mayores ese CUPRA Ateca VZ son de equipamiento. Portón trasero eléctrico, cámara de visión 360, el pack Connectivity Box, el Launch Control, el conjunto CUPRA Drive Profile, la dirección progresiva y el DCC, el Travel Assist, el detector de ángulo muerto y el Light Assist.
Siguiendo con las diferencias entre TSI 190 y 300, hay una muy clara que son las prestaciones. Teniendo en cuenta que ambos cuentan solo con cambio automático DSG de 7 velocidades y tracción total 4Drive, en términos de aceleración el primero completa el 0-100 en 7,2 segundos y el segundo baja a 4,9 segundos. Esta ventaja cambia cuando hablamos de consumos homologados, con 8,1 y 9 litros respectivamente.
Y finalmente quedaría hablar de la diferencia de precio entre ambos. El CUPRA Ateca TSI 190 parte de los 45.190 euros, mientras que el VZ sube hasta los 51.650 euros. Es una diferencia para pensárselo, pero si es verdad que hace no mucho tiempo era mucho mayor.
Prueba CUPRA Ateca: ¿son suficientes 190 CV?
A ese dinero también habría que sumar otros 1.127 euros que cuentan los asientos de piel/PVC en color negro que te reciben una vez sobrepasas el logo iluminado por el retrovisor en el suelo y el umbral de la puerta. Su aspecto es muy deportivo, con ese detalle del reposacabezas integrado y la verdad que recogen bien el cuerpo. A mi alrededor encuentro materiales muy parecidos a los que ya lucía antes el SEAT Ateca, con buenos ajustes y un diseño al que le van pesando ya un poco los años a nivel estético, pero que sigue siendo ergonómico.
Voy a buscar el botón en la consola central donde normalmente estaba el encendido y me encuentro en su lugar el que desactiva el control de tracción. Esto es debido, y lo celebro, a que dicho mando ahora está en el volante, donde también han ubicado el de los modos de conducción para no tener que acudir a la ruleta colocada al lado del freno de mano eléctrico.
En dicho modo Comfort este CUPRA Ateca da un poco sensación de ir demasiado suelto de suspensiones, pero a la hora de atacar las curvas no hay balanceos y se puede obtener un paso rápido. Aunque luego el rebote es fuerte y cuando pasas un badén o bache se nota duro. Además de este, encontraremos en el SUV los Sport, el que probablemente usarán más sus compradores, el Offroad, este por el contrario creo que se utilizará poco aunque cuentes con una pantalla específica en la multimedia cuando lo activas, el Snow para suelos resbaladizos y el Individual. Y en este último me detengo, porque puede ser una muy buena opción para dejar el coche a tu gusto. Me refiero a que podrás escoger entre tres posibilidades para el DCC (control de chasis adaptativo), otras tantas para la respuesta del motor o el ACC (control de velocidad adaptativo), y dos tanto para la dirección como para la climatización.
Y me estoy dando cuenta que todavía no he hablado del motor TSI 190 CV de este CUPRA Ateca. Como comprobábamos antes que os comentaba lo de las prestaciones, está claro que no es mismo nivel que el TSI 300, pero creo que es un propulsor con el que te podrás divertir también ya que el chasis lo aguanta sin problemas. Su carácter es un tanto alemán, más que latino, pues al entregar de forma plana el par de 320 Nm desde 1.500 a 4.100 rpm, no notarás que te lance fulgurantemente pero en poco tiempo irás rápido. Y justo en 4.200 rpm es donde encontrarás la potencia máxima.
Durante la mayoría de mis desplazamientos con este CUPRA Ateca dejé que la DSG “me llevara” porque obviando lo que comentaba antes en modo Comfort, si se adapta bien a las exigencias de nuestro pie derecho. Además, cuenta con un modo S que la vuelve un poco más picante y permite actuar sobre ella de forma manual, para esos momentos en los que quieras más implicación, con el pomo o con unas levas detrás del volante, que podrían tener un plástico de mejor terminación.
Cerraríamos este apartado con los consumos, pero en este tipo de coche de carácter deportivo entenderás que variará mucho dependiendo de tu conducción. En mi caso en el total de la semana que estuvimos juntos acabó con 7,8 litros, lo que serían dos décimas menos del homologado, realizando viajes a velocidades constantes, pillando algunos atascos urbanos y con ciertos momentos de alegrías.
Los rivales del CUPRA Ateca 190
Los tiempos en los que nos encontramos en los que la electrificación y el control de las emisiones son grandes protagonistas han provocado que no haya muchos SUV deportivos con motores de combustión en el mercado. Por ello, la principal competencia de este CUPRA Ateca la tiene dentro del mismo grupo, con un Volkswagen T-Roc R-Line (48.355 euros) o un Skoda Karoq Sportline Plus (49.400 €), que disponen de la misma configuración mecánica, para mí algo menos de picante deportiva y con precios superiores.
Y luego podría surgir otra alternativa. Me refiero al Ford Puma ST, que si bien parte de un segmento más bajo dentro de los SUV, sus medidas son parecidas. El modelo americano en esta versión deportiva cuenta con un motor híbrido ligero de 170 CV, que podría aguantar un enfrentamiento directo con nuestro protagonista. Y con un precio de 31.615 euros.
