El próximo coche eléctrico que fabricará Ford en Amussafes será en una nueva plataforma a la GE-2
En un encuentro reciente con el Comité Europeo el 5 de febrero, Kieran Cahill, vicepresidente de Ford Europa encargado de Producción, mencionó que la marca está explorando soluciones alternativas para el desafío que enfrenta la planta de Almussafes en Valencia. Este desafío consiste en mantener la actividad de la planta hasta que inicie la producción de vehículos eléctricos.
La posible adjudicación de este nuevo proyecto a la planta de Almussafes respondería a las demandas del sindicato UGT, que busca asegurar un volumen de producción de 200.000 unidades anualmente para preservar los empleos actuales. Se anticipa que la producción del Kuga para 2024 sea de aproximadamente 130.000 unidades, con una disminución proyectada para los años siguientes.
Este vehículo adicional representaría un lanzamiento nuevo dentro de la gama de Ford, y no implicaría traslados de producción de otras fábricas. Además, se espera que la producción de vehículos eléctricos en Almussafes comience entre 2028 y 2029, con una plataforma diferente a la GE-2, orientada hacia vehículos de tamaño medio y pequeño. Este cambio forma parte de una nueva estrategia de electrificación anunciada por el CEO global de Ford, Jim Farley.
A pesar de los rumores sobre la adjudicación de un nuevo modelo y los cambios en el proyecto eléctrico, Ford ha indicado que por el momento son especulaciones y que cualquier decisión al respecto todavía está siendo evaluada por su dirección global.
La asignación de un nuevo coche a Almussafes es crucial no solo para mantener la actividad y los empleos en la planta, sino también para adaptarse a los retrasos en la producción de vehículos eléctricos, que ahora se espera comience más tarde de lo previsto. La industria y los trabajadores esperan con interés las resoluciones provisionales del Ministerio de Industria sobre el soporte económico para la transformación de la planta, que se anunciarán a finales de este mes.