El Kia K4 ya es una realidad. La nueva generación de los Cerato/Forte finalmente tomará esa nueva denominación en los principales mercados internacionales y promete, con su exótico diseño, no dejar indiferente a nadie aunque esto le pueda costar más de un cliente.
Si el Kia K3 había arriesgado bastante con su estética muy personal, el K4 va un poco más allá llevando al extremo el uso de las líneas rectas para conseguir una imagen impactante que desde luego no gusta a todos. Habrá que esperar un poco para sacar conclusiones pero en este segmento lo que suele triunfar es la estética más continuista y sencilla.
Lo que no admite críticas es el interior que goza de un diseño muy limpio, con un salpicadero bien presentado que deja todo el protagonismo a la instrumentación digital y a la pantalla del sistema multimedia. Además mantiene mandos de climatización independientes y transmite buena sensación de calidad.
