Logos de Renault y Nissan durante la Feria del Automóvil de Bruselas, el pasado 9 de enero.
El fabricante japonés llevaba tiempo intentando limitar el control de la firma francesa en su gestión. A partir de ahora las compañías tendrán derecho a voto equivalente a su participación del 15%, no más. En el esquema actual dominante de Renault sobre Nissan, la firma japonesa no tenía derecho de voto en el grupo francés. Mientras, Renault logra que Nissan invierta en Ampere, la unidad de negocio de desarrollo del coche eléctrico, “con el objetivo de convertirse en un accionista estratégico”. No se cuantifica el montante de la inversión.
El 28,4% restante de la participación de Renault en Nissan se transferirá a un fideicomiso francés, donde los derechos de voto serán “neutralizados” para la mayoría de las decisiones, manteniendo los derechos económicos (dividendos y productos de venta de acciones), según el comunicado, que afirma que este acuerdo garantiza “una gobernanza equilibrada”. “Renault dará instrucción al fideicomisario de vender estas acciones de Nissan si las condiciones económicas son razonables para Renault, en un proceso organizado y ordenado, pero no habrá ninguna obligación de vender sus acciones en un plazo específico predeterminado”, afirma.
Los acuerdos están “en curso de finalización” y la operación queda sujeta a la aprobación de los consejos de administración de Renault y de Nissan.