Jorge Prado, en las oficinas de Red Bull en Madrid.
Logró su gran sueño, alcanzar la cima como campeón del mundo de motocross, pero lejos de relajarse, Jorge Prado (23 años, Lugo) ha tenido un inicio de año frenético. Renunció a un invierno tranquilo por vivir otra gran experiencia, la de competir con los mejores de Estados Unidos en el Supercross. Cuatro citas en una nueva especialidad que, como cuenta en AS, le han dejado con ganas de más, que se pueden revivir en un documental de Red Bull y ‘DAZN’ y que le hacen estar mejor preparado para defender su corona en MXGP a partir de este 10 de marzo en Argentina.
—Viene de ganar en su tierra, con homenaje incluido, tuvo que ser un momento especial.
—Sí, competir en casa siempre es especial y, además, poder ganar es una buena manera de empezar el año. Contento, salió todo perfectamente, buenas sensaciones, buena carrera y también sirvió para recargar las pilas pasando unos días en casa de cara al inicio de la temporada.
—Y solo ha sido el primero, porque este año además correrá allí en el Mundial. Eso sí que va a ser algo enorme, ¿qué significa para usted?
—Es algo increíble. Hace un par de años era impensable simplemente tener un circuito un Lugo, así que un Mundial de motocross estaba fuera de todo alcance, pero por fin lo tenemos, en el sitio en el que crecí, donde empecé. Para todos los amantes del motocross va a ser un gran evento y estoy muy orgulloso de tener un gran premio en mi ciudad natal.
—¿La afición tiene ganas de MXGP allí?
—Sí, va a ser un evento muy especial porque va a atraer muchísimo público. En el Nacional el tiempo no nos acompañó porque hubo mucha lluvia, pero para el Mundial va a ser otra historia. Vamos a llenar el circuito. En Galicia, en la parte norte de España y en el país en general la gente se mueve para ver estas carreras. Hay mucha afición a las motos y espero que sea la carrera con más público.
—¿Ya se ha acostumbrado a ver el ‘1′ en su GasGas?
—Sí, (ríe). Me gusta llevarlo, cada vez que veo el ‘1′ en la moto me motiva y me recuerda la temporada pasada. Va a ser un año bastante bonito con ese número.
—Al final te abre muchas puertas. Por ejemplo, ir a competir a Estados Unidos después de hacerme con el título. Pude aprovechar esa experiencia al máximo y ahora ya estoy muy centrado en revalidar al título.
—Tres ‘1′ llevó en su moto (dorsal ‘111′) en esa aventura en EE UU. Antes de centrarnos en MXGP y ahora que ha podido reposarla, ¿qué sensación le dejó la gira americana?
—Muy buena, fue una experiencia increíble. Competir por primera vez en el Supercross fue algo a la vez raro, porque me hizo salir de mi zona de confort y no es fácil, pero fue también algo necesario de cara al futuro para saber lo que quiero hacer en los próximos años. Intenté aprovecharlo y disfrutarlo todo al máximo posible porque sabía que iban a ser un par de pruebas y tendría que volver. Quería saber bien cómo funciona la competición, los entrenamientos y la vida allí para hacerme un poco a la idea.
“El SX me hizo salir de mi zona de confort, pero fue algo necesario de cara al futuro”
—Al final se quedó un poco más de lo que esperaba…
—Sí, tuve un poco de mala suerte con el tiempo también. De las tres pruebas que teníamos previstas dos fueron con barro y presionando un poquito pude alargarlo una semana y así competir en Anaheim otra vez, donde hice mi primera carrera y la última, que fue en un formato especial con tres carreras y así pude probar un poco de todo.
—Son carreras de motocross en superficies de arena y ahí se acaban las similitudes con MXGP… Explique lo difícil que es adaptarse a ese mundo por mucha experiencia que se tenga en el motocross tradicional.
—Cuando fui para allá pensé que el Supercross iba a ser más similar al motocross, pero me di cuenta de que son casi dos deportes diferentes. Sí que es verdad que la moto es una base de cross, pero las suspensiones, el chasis, el motor son tan diferentes que hace que cuando te subes a la moto todo el ‘feeling’ que tenías del motocross cambie. Además, los circuitos son mucho más estrechos, todo está más reducido, los saltos más puntiagudos… Tienes que tener un nivel de precisión mucho mayor para no fallar porque cada fallo puede tener mayores consecuencias. Y también se compite por la noche, que es muy diferente. Nosotros estamos acostumbrados a un formato de dos días con las carreras el domingo a las 14:00 y a las 17:00, no a las 20:30… Cuando llegó Anaheim 1 no sabía si irme a cenar a competir (risas). Es cuestión de ir adquiriendo experiencia y acostumbrarse.
—¿Le gustó la cercanía con el público y el ambiente que hay?
—Sí, estoy muy contento porque el público me transmitió mucho calor. Muchos aficionados se acercaron a saludarme y a felicitarme por la temporada. Me sentí muy arropado tanto por el público latinoamericano, que es inmenso, como por el americano.
—Precisamente, el documental que estrena en ‘DAZN’ cuenta aquello. ¿Qué se puede ver? ¿Qué Jorge Prado se encontrará la gente?
—Después de esas cuatro citas acabó su participación en el ‘top-10′ del campeonato, es para estar satisfecho.
—Sí, la verdad es que los resultados fueron increíbles. Ya solo clasificarse sin tener nada de experiencia en el Supercross, siendo todo nuevo para mí. Estar directamente en el ‘top-10′, ganar una manga en mi segunda carrera… fueron resultados bastante impactantes para todo el mundo yo creo, hasta para mí.
—La gran pregunta, ¿se ha quedado con ganas de más Supercross? ¿Puede tener un futuro allí a tiempo completo?
—Yo me he quedado con ganas de más, pero hay que valorarlo bien todo antes de ir allí. Es un paso muy grande, es dejarlo todo atrás y empezar prácticamente de nuevo. Sería una vida totalmente diferente y hay que pensarlo bien antes de tomar una decisión tan grande.
—¿Qué ha aprendido en el Supercross que pueda poner en práctica en MXGP?
—Yo creo que todo ayuda. El tipo de entrenamiento también es diferente, las mangas son mucho más cortas e intensas. A nivel psicológico requiere mucha más concentración, desarrollas otras habilidades con la moto… Son muchas cosas positivas que se pueden aplicar al motocross.
—¿Diría que es mejor piloto después de ello?
—Yo creo que sí, más completo… Sí, seré mejor piloto, sí (risas). ¿Un aviso para los demás? No sé, pero en este momento sí que estoy, cien por cien, mejor que el año pasado.
—¿Y le ha servido para llegar en mejor forma al inicio del Mundial o puede que le pase factura el no haber tenido descanso en invierno?
—Bueno, espero que no me pase factura, pero sí que voy a llegar mejor que el año pasado a la primera cita. De hecho, ahora mismo me encuentro muy bien y me sirvió.
—Sí, ellos serán los rivales más directos. Yo me encuentro bien este año, así que veremos cómo va la temporada.
—Pero este año, como vigente campeón, también es el principal objetivo a batir.
—Me imagino que van a ir a por mí, porque si yo fuese ellos, iría a por mí (ríe). Pero tampoco me supone presión extra, sino motivación. Soy yo el que lleva el número ‘1′ y eso es positivo.
“Imagino que van a ir a por mí, pero tampoco me supone presión extra, sino motivación”.
—El año pasado le funcionó de maravilla su gestión de la temporada, sabiendo cuando arriesgar y cuando levantar el puño del gas. ¿La idea es repetirla?
—Mi estrategia es siempre ser lo más constante posible, no cometer fallos, si veo que hay que arriesgar yo soy el primero que no quiere hacerse daño. Hay que mantenerse encima de la moto lo máximo posible y que las lesiones nos respeten. Y para hacerse con el título lo importante también es ganar carreras y sumar muchos puntos todos los fines de semana.
—Además, en 2023 cogió la placa roja el primer fin de semana y ya no la soltó. Puso el listón muy alto, ¿cómo se supera eso?
—El año pasado fue una temporada increíble estando desde la primera carrera hasta el final siempre liderando el campeonato. Pero creo que este año tengo un plus porque vengo mejor preparado y puedo dar aún más. Tengo ganas de que empiece la temporada y rendir a un buen nivel.
—¿Tener dos citas en España también dará un plus de motivación? Está haciendo crecer este deporte aquí.
—Sí, digamos que a raíz de mis títulos hemos podido tener grandes premios en España y ahora uno en mi ciudad. Además, este año coincide en que la primera prueba europea del Mundial es la de Madrid, así que empezamos fuerte el campeonato. Muchas ganas de competir.
—¿Han mejorado algo la GasGas para este año?
—Es lo que se intenta siempre, mejorarla un poco, pero viene siendo la misma de 2023, con un par de cambios en las suspensiones que estamos intentando comprender. Pero me encuentro bien con ella, estamos en el buen camino
—Para acabar, ¿pedimos el mismo deseo del año pasado, salud porque no necesita suerte?
—Exacto. Sí, lo que no necesito es mala suerte. Que me respeten las lesiones, ya lo demás lo pongo yo. Si no me lesiono, creo que tengo muchas posibilidades de hacerme con el título.
