El poder que está adquiriendo el Sindicato de Trabajadores de los sectores del Automóvil, Aeroespacial y de Producción de Maquinaria Agrícola en Estados Unidos y Canadá, mejor conocido como la UAW, está sobrepasando todos los pronósticos, pues luego de su cruzada contra las Tres Grandes de Detroit, en la que salió victoriosa, varios trabajadores de otras fábricas quieren ser representados por esta asociación.
Los primeros en tomar el paso definitivo fueron los trabajadores de la fábrica de Mercedes-Benz en Tuscaloosa, Alabama, donde actualmente la firma alemana produce los modelos GLE, GLS, EQE, EQS, GLS Maybach y EQS Maybach, además, muy cerca de ahí está la planta de baterías de Mercedes-EQ.
Además de la votación de Mercedes-Benz, el sindicato tendrá el próximo 19 de abril también una elección con los trabajadores del complejo de manufactura de Volkswagen en Chattanooga, Tennessee, un lugar en el que la UAW no ha podido hacerse con la representación de los trabajadores en las votaciones previas en 2014 y 2019.
Además de las fábricas de Tuscaloosa y Chattanooga, la UAW está tratando de unir a los trabajadores de las plantas de Hyundai en Montgomery, Alabama, y Toyota en Troy, Missouri. También han coqueteado con colaboradores de Tesla, Rivian y BMW.