Todo éxito rápido no viene solo. También hay retos. Y estos son los mayores a los que debe enfrentarse Tesla.
No hay ningún otro fabricante de automóviles en la historia reciente de la automoción que haya registrado un crecimiento tan rápido como Tesla, que, sin duda, es el protagonista de los últimos 10 años en la industria.
Tesla ha sido capaz de liderar el mercado mundial de vehículos eléctricos introduciendo coches atractivos y competitivos, en el momento y los lugares adecuados. La empresa propiedad de Elon Musk, y dirigida por él en persona, se ha convertido desde entonces en el referente cuando un conductor piensa en un coche eléctrico.
Pero todo éxito rápido no viene solo. También hay retos. Estos son los cinco principales retos que, en mi opinión, Tesla debe afrontar:
1. Localización
Esto significa que, debido a una mayor regulación, cuyo objetivo es proteger la industria local, la importación de coches es cada vez más difícil. La consecuencia es una tendencia creciente a la localización en la que los fabricantes de equipos originales (OEM) aumentan su presencia en la producción local, amplían los grupos de proveedores locales y reducen la dependencia de componentes extranjeros.
En la actualidad, Tesla cuenta con cuatro centros de producción en todo el mundo (dos en Estados Unidos, uno en China y otro en Alemania). Si quiere aumentar su presencia en los mercados emergentes, tendrá que establecerse en muchos de estos países, y no sólo en México, como estaba previsto. Al localizar su producción, Tesla puede responder mejor a la dinámica de cada mercado, pero también puede ver afectados sus beneficios al no contar con productos y suministros globales.
2. China
El principal reto de Tesla en China viene de su fuerte dependencia de este país. Un tercio del volumen global de Tesla en el primer semestre de 2023 se entregó en China. Es junto con Volkswagen, BMW y Mercedes-Benz, uno de los OEM occidentales más expuestos a la demanda china.
La otra amenaza es el rápido crecimiento de las marcas chinas de automóviles y sus modelos eléctricos. Los vehículos eléctricos son una parte esencial del desarrollo económico de China en los próximos años, y una forma de expandir su industria en el extranjero.
Hay más de 170 marcas de coches locales, muchas de las cuales se dirigen a segmentos similares al de Tesla. NIO, Xpeng, BYD, Avatr, Geely Galaxy y muchas otras están aprovechando el generoso apoyo estatal para presentar productos muy interesantes y unas prestaciones de baterías que podrían llegar a enfrentarse a los clientes potenciales de Tesla.
3. Gama de producto
Tesla necesita dirigirse a más segmentos. Esto requiere una gama más amplia y actualizada. El Model S ya tiene 12 años, seguido del Model X, que tiene 8. El Model 3 se presentó en marzo de 2016, mientras que el Model Y, el producto más reciente, llegó a los mercados en marzo de 2019. Esto da una edad media de 8,1 años para su pequeña gama.
4. ¿Un nuevo dinosaurio?
A medida que su volumen de ventas crece rápidamente (se espera que venda entre 1,9 y 2,1 millones de vehículos este año), Tesla necesita evitar parecerse al resto de sus competidores. Esto significa no volverse demasiado burocrática en sus operaciones diarias y en la toma de decisiones.
Uno de los principales atributos que le han permitido triunfar es su flexibilidad/agilidad. Pero cuando una start-up se convierte en una “Inc.”, suele haber más personas implicadas en los procesos, con las consecuencias directas sobre los plazos y los costes que ello supone.
5. Mercados emergentes
La industria del automóvil suele concentrarse en lo que hacen China, Japón y Corea del Sur (en Asia), Estados Unidos (en América) y Europa. La industria apenas incluye el resto del mundo, aunque represente alrededor del 22% de las ventas mundiales de vehículos ligeros.
Estamos hablando de más de 17 millones de unidades que, de alguna manera, están excluidas del alcance Tesla ahora mismo. Si la marca realmente quiere ser global, debe conseguirlo con productos dedicados, que se ajusten a los ingresos de la población.
El autor de este artículo, Felipe Munoz, es especialista en la industria del automóvil en JATO Dynamics.
