Duras acusaciones desde China contra la investigación a los coches eléctricos chinos en la UE.
Durante este tiempo, hemos escuchado opiniones de todo tipo al respecto. Obviamente, desde China no se ha visto con buenos ojos esta investigación y han amenazado desde el primer momento con tomar medidas si el proceso salía adelante. En cambio, en Europa ha habido disparidad de opiniones, desde el extremo de Stellantis, que pide jugar «en igualdad de condiciones» y más aranceles para los fabricantes chinos, hasta el otro, con marcas como BMW advirtiendo que la investigación podría hacer más daño que bien.
Tras la audiencia llevada a cabo la semana pasada con la Comisión Europea, Shi Yonghong, vicepresidente de la Cámara de Comercio de China para la Importación y Exportación de Maquinaria y Productos Electrónicos, lanzó unas duras acusaciones contra los estamentos europeos.
La CCCME, que representa a 12 productores de coches eléctricos chinos, mostró su preocupación por la elección de las marcas que la comisión de investigación europea había realizado para sus pesquisas: BYD, Geely y MG. Desde el conglomerado de empresas chinas, se acusa a Europa de una elección «sesgada», ya que no se ha incluido en la investigación a los principales exportadores de China a la Unión Europea, que en 2023 fueron Tesla y Dacia. «Esta selección de muestra sesgada ha contaminado todo el proceso de investigación».
Shi Yonghong teme que las futuras conclusiones que se lancen desde la UE puedan estar «distorsionadas» y ser «poco objetivas», acusándoles de faltar a la transparencia y violar las reglas del comercio global. Y todo esto, por cierto, antes de que se conozca el resultado de dicha investigación, pero desde China ya se está acusando a Europa de falta de transparencia y de proporcionar datos inadecuados.
Estados Unidos valora también echar marcha atrás en sus planes de expansión de los coches eléctricos
«Europa respeta las reglas, dentro de sus fronteras y a nivel mundial. Esta investigación antisubvenciones es exhaustiva, justa y está basada en hechos», aseguran desde la Comisión Europea, que promete respetar las obligaciones internacionales y de la UE en todo momento. Y todo ello en un contexto donde algunos gobiernos y algunas marcas buscan dar cobijo a los gigantes automovilísticos chinos, como España y Chery, que están cerca de firmar un acuerdo para producir vehículos en Barcelona.
Fuente | Automotive News Europe