Arturo González Cantú y Víctor Hugo Sepúlveda, socios de Grupo Peak, aparentemente se “esfumaron” y no dan la cara después del repentino anuncio de quiebra de la empresa, lo que desencadenaría en la posible pérdida del capital de sus clientes en San Pedro, Nuevo León, por lo que el tema ha generado una gran polémica y la angustia de quienes podría haber perdido su dinero.
De acuerdo con El Horizonte, las pérdidas de los clientes tras el anuncio de quiebra podrían rebasar los 800 millones de pesos, por lo que los afectados podrían presentar denuncias penales.
Según se dio a conocer, la empresa anunció que ya no tiene fondos para liquidarles a sus clientes su inversión, muchos de ellos son personas que no son adineradas, viudas, jubilados, gente que solo buscaba cómo hacer rendir sus ahorros de toda la vida, gente que confió en una empresa encargada de mover capital en cuentas de inversión en el extranjero.
Ante la falta de respuestas e información precisa de la empresa hacia sus clientes, las principales sospechas son que la quiebra pudiera deberse por malas gestiones financieras, por fallas en las estrategias de negocios, o porque se robaron el dinero.
Mientras tanto, algunos afectados ya se han acercado a abogados para levantar denuncias penales por sus recursos perdidos.
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