Un hombre con su bicicleta
Pero al auge de la compra de este tipo de productos también ha provocado un incremento en el mercado negro, por los robos que se han generado en este mercado, sobre todo con las de mayor valor.
Ejemplo de ello es lo que ha ocurrido en una de las ciudades españolas clave en el uso de bicicletas, Murcia. Según publicó La Verdad el pasado mes de octubre, se provocaron 27 denuncias de robo de bicicleta por cada 100.000 habitantes.
El candado se ha convertido en algo imprescindible si se deja la bicicleta aparcada en la calle. Algunos de ellos son más duros y resistentes para evitar que se rompan y puedan hacerse con ella.
Pero, el remedio eficaz, es el de la válvula. Si se fija el candado a ella, en la rueda, si alguien rompe la cerradura, dejaría la válvula rota. Algo que afectaría de forma directa al medio de transporte y sería un inconveniente para luego venderlo en el mercado negro.