Eran dos de las grandes novedades de Opel para los dos próximos años y de los coches más esperados. Sin embargo, de momento Opel los cancela.
Opel ha cancelado el desarrollo de los futuros modelos 100% eléctricos (BEV) Manta e Insignia. Ambos iban a terminar de diseñarse como crossover eléctricos y tenían previsto encabezar la gama de la marca alemana de Stellantis a partir de 2025.
Decisión del grupo
Tal y como cuentan desde ‘L´argus, el grupo ha sacrificado el Manta y el insignia BEV, dando prioridad a la renovación de las marcas italianas del grupo como Fiat o Alfa Romeo. El grupo, en pie desde 2021 después de que se fusionaran PSA y FCA, alberga alrededor de quince marcas automotrices que se reparten entre Francia, Italia, Alemania, Reino Unido y EE.UU. Su gestión a veces requiere decisiones difíciles al conglomerar tanto, como en el caso del parón del desarrollo de estos dos modelos, algo por lo que se optó a finales de 2023.
El Opel Insignia 2025 de momento se cancela.
Plan antiguo
Opel había anunciado el regreso del Manta con un boceto en el que se podía ver un SUV de estilo coupé BEV del segmento C que saldría para 2025. La resurrección del Manta era un concepto muy diferente al del pequeño coupé de los años 70, diseñado como un SUV 100% eléctrico.
Respecto a la berlina Insignia, se sabía poco de su reemplazo, salvo que iba a tratarse de otro 100% eléctrico más y posiblemente también un crossover. No obstante, este modelo tampoco se producirá.
El porqué
La decisión en conjunto de la decisión de Opel de no expandir su gama hacia modelos premium se ha tomado en gran medida de cara a permitir que las marcar italianas dentro del grupo, como Lancia y Alfa Romeo, lleven a cabo su proceso de renovación de modelos. Lancia, de hecho, tiene planes de renovar los modelos Ypsilon, Gamma y Delta antes de 2028, mientras que Alfa Romeo está buscando aumentar el número de modelos de tres a siete, aproximadamente, de car al 2030.
La distribución del presupuesto dentro de Stellantis fue un factor determinante en estas decisiones, con la familia Agnelli, que es propietaria histórica de Fiat y ahora forma parte de Stellantis, influyendo en la asignación de recursos. Estas decisiones buscan también servir como respaldo a Jeep y Dodge en sus respectivos esfuerzos de rentabilidad y electrificación.