La variante Wilderness del Subaru Crosstrek debuta en Estados Unidos, con argumentos todoterreno. Es poco probable que llegue a Europa.
El Subaru XV pronto dará paso en Europa en el nuevo Crosstrek. De hecho, lo que en su día fue la versión elevada del Impreza, se ha convertido con los años en un modelo independiente por derecho propio, con identidad y personalidad específicas.
Afirmación todavía más acertada en el caso de la versión Wilderness, una variante para los amantes del todoterreno más exigente, que se ha presentado en el Salón del Automóvil de Nueva York, antes de su desembarco en el mercado norteamericano.
Preparado para la aventura
En definitiva, es una pena porque, en cuanto a equipamiento, este Subaru podría tener muy pocos rivales en su segmento (el Jeep Compass Trailhawk sería uno de los pocos). El Crosstrek Wilderness, de hecho, combina las proporciones típicas de un crossover de tamaño medio con un aspecto rudo, de auténtico todoterreno.
Sus rasgos distintivos incluyen un nuevo parachoques con detalles en naranja y carcasas hexagonales de los faros antiniebla, una placa de aluminio en los bajos de la parte delantera y un protector de plástico negro que envuelve toda la carrocería, para proteger la carrocería de la grava y el polvo.
En definitiva, el diseño es más agresivo, pero también más funcional para aventurarse fuera del asfalto, gracias a la presencia de neumáticos Yokohama Geolandar todo tiempo, montados sobre llantas de aleación negras de 17 pulgadas.
De cara a abandonar el asfalto, la altura libre al suelo aumenta en 15 mm respecto al Crosstrek tradicional, para sumar un total de 24 cm, permitiendo circular con bastante desahogo por campo.
Un crossover para disfrutar en el campo
El interior del Subaru no cambia mucho, salvo por algunos detalles en naranja y la insignia “Wilderness” en los reposacabezas de los asientos. Por lo demás, se mantiene el sistema de infoentretenimiento con pantalla vertical de 11,6 pulgadas, compatible con Apple CarPlay y Android Auto inalámbrico.
En la práctica, al activar estos modos, el sistema actúa sobre la tracción total y la entrega de potencia para minimizar el deslizamiento de las ruedas.
También activando el X-Mode, al subir una pendiente pronunciada a baja velocidad, la transmisión automática CVT entra automáticamente en el modo “Control de pendiente” cambiando a la relación de marcha más baja disponible. Por último, como en el Crosstrek ‘normal’, cuenta con el Control de Descenso de Pendientes, que controla la velocidad en los descensos.
Bajo el capó del Wilderness hay un motor 2.5 de cuatro cilindros, con 185 CV y 239 Nm de par, que es más potente que el 2.0 con 155 CV y 196 Nm que se encuentra en el resto de la gama Crosstrek. Una cifra modesta, no cabe duda, comparada con la que ofrecen algunos rivales directos.
