.
Claro está que para poder acceder a las funcionalidades que ofrece este dispositivo, es necesario tener un iPhone, un iPad o una computadora Mac para poder acceder a la app “Find My”.
Si el AirTag está cerca, el iPhone ayuda a localizarlo con un rastreo preciso, esto gracias a la tecnología de banda ultra ancha. Cuando está lejos, la red de la aplicación, compuesta por cientos de millones de iPhone, iPad y Mac de todo el mundo, ayuda a localizar el dispositivo y, por ende, el auto.
¿Cómo funciona?
Todo el proceso es anónimo y está encriptado para proteger la privacidad de los usuarios. No almacena la información ni el historial de la ubicación, para que sólo el usuario pueda ver dónde se encuentra. Ni siquiera Apple tiene acceso a la ubicación del AirTag ni a la identidad del dispositivo que ayude a encontrarlo.
Otra de las ventajas de tener un AirTag en el automóvil es que está diseñado para funcionar por más de un año con una batería estándar que puedes reemplazar fácilmente.
¿Mejor qué un rastreador GPS?
En cambio, el AirTag sólo se tiene que guardar en algún compartimiento del automóvil y recargarlo cada año, incluso la aplicación envía una notificación cuando la batería está baja.
Debido a que utiliza la ubicación de otros iPhone, si el ladrón que roba el auto tiene un iPhone, en realidad ayudará a localizarlo de manera más precisa.
¿Cuál es la desventaja?
A diferencia de un rastreador GPS genuino, el AirTag no brinda actualizaciones de ubicación precisas y en tiempo real. Además, si el auto está en una zona desértica donde no existan personas que tengan un iPhone, será complicada su ubicación.