Presentado y lanzado en 2017, el Tesla Model 3 se ha convertido en uno de los pilares del crecimiento del fabricante americano. Una berlina que afronta su sexto año en el mercado, tiempo durante el cual se ha ido renovando y actualizando. Pero el paso del tiempo ha sido imparable, y ahora se aproxima el momento de recibir una verdadera actualización.
Tesla lleva tiempo trabajando en la renovación de la berlina, y ya el pasado mes de noviembre la agencia de noticias Reuters habló por primera vez sobre el proyecto Highlander. Una iniciativa para renovar al Model 3 y recuperar la senda positiva de ventas.
Para conseguirlo, Tesla además de dar un toque estético más moderno, tanto exterior como interior, también aprovechará para mejorar la eficiencia del proceso de fabricación. Un paso clave para reducir los costes de fabricación que permita mantener márgenes de beneficio al mismo tiempo que se continúa bajando precios de venta.
Este movimiento podría responder a un intento de la compañía por marcar distancias respecto a su futuro compacto de acceso, acercando la estética del Model 3 a la zona alta de su gama. Los paragolpes por su parte resultan más sobrios, mientras que las llantas de aleación parecen ser de nueva factura.
Otro interesante detalle es la aparición de una cubierta sobre el volante, lo que abre la puerta a que Tesla finalmente haya decidido dotar a su berlina mediana de una instrumentación digital, lo que de nuevo le permitiría diferenciarse de su futuro hermano pequeño. De acuerdo con los informes previos, la zaga también recibirá algunos cambios que han sido recreados por el diseñador @CYBRTRK420.
Un nuevo modelo que como vemos comenzará su fase industrial este próximo mes de junio, lo que abre las puertas al arranque de su producción en cadena en el tercer trimestre de este año, posiblemente como sucedió con el primer Model 3 a lo largo del mes de julio o agosto, aprovechando el parón parcial por las vacaciones.