El preparador americano se aleja (pero no mucho) de las prestaciones puras para crearnos otra necesidad que antes no teníamos: la de un vehículo listo para hacer más llevadero el fin del mundo.
Hennessey
Antes del Venom F5, no teníamos la necesidad de conducir a casi 500 km/h. Y ahora que, salvo cuatro eternos pesimistas, tampoco necesitábamos un coche que aguantara los estragos del fin de la humanidad, Hennessey nos vuelve a poner los dientes largos con la impresionante preparación ‘camper’ de su Mammoth 1000 TRX.
Lista para la aventura más extrema
En Estados Unidos, ‘overland’ es la palabra que define a la práctica de recorrer la naturaleza a bordo de un vehículo campo a través, sin atender a carreteras, caminos ni ninguna otra ruta prefijada. Y hacerlo con la libertad de poder descansar en cualquier sitio, ya que contamos con una caravana o tienda de campaña instalada.
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Por debajo de la tienda, dos placas de soporte sirven para apoyar la escalera de acceso a la misma pero también incluyen enganches para llevar herramientas como un hacha, una pala y dos pequeños depósitos auxiliares de combustible y agua presurizada. Asimismo, un sistema de iluminación perimetral en Led permite trabajar incluso bajo una noche cerrada.
Hennessey
Sin duda, un complemento ‘camper’ muy interesante para una camioneta que, fiel a la filosofía de la casa, tiene prestaciones más que suficientes para superar cualquier terreno por difícil que sea. No en vano, la transformación que sufre el 6.2 V8 ‘Hellcat’ de la RAM 1500 TRX original lo deja con unos escandalosos 1.026 CV a 6.500 RPM. Ideal para alejarse rápidamente de una explosión nuclear o una horda de zombis, vaya.