Hay veces que al ponerte a escribir sobre ciertos temas te preguntas qué puede llevar a la gente a hacer cierto tipo de cosas. La que te voy a contar es una de ellas. De ahí mi pregunta: ¿Qué motiva a alguien a dejar abandonados tres Tesla Roadster en un contenedor de China desde -ojo al dato- 2010? Y es que no son coches cualesquiera, ¡son Tesla!
En caso de hacerle una oferta individual, el coste ascenderá a 76.000 dólares (68.784, euros).
Al dinero que deberán pagar por ellos hay que agregar los gastos de revisión y, muy probablemente, de sustitución de algunos componentes mecánicos (sobre todo el cambio de baterías tras tanto tiempo parados), lo que, con facilidad, supondrá un importe extra de más de 100.000 dólares (90.505 euros). Pero lo más destacable es que tendrán el cuentakilómetros a cero.
En caso de no encontrar un comprador en China, los tres coches se enviarán a Estados Unidos a mediados de mayo, donde se realizará una revisión mecánica para comprobar su estado y es probable que se salgan subastados.
Cada uno de los tres ejemplares presentan las especificaciones del mercado estadounidense, que es donde se vendieron. De los tres coches, el primero es de color rojo y contiene la máxima dotación de extras que ofrecía Tesla entonces; el segundo es idéntico, aunque de color naranja. Y el tercero de ellos también está pintado en naranja, pero su acabado es el básico.
La única mácula que se puede apreciar en su apariencia exterior es el polvo que acumula cada uno, debido, sobre todo, a que los contenedores están sellados para evitar que entren grandes cantidades de suciedad u otros elementos.
Una vez te adentras en el habitáculo también ves que está como recién sacado del concesionario. Además, aún tiene numerosas pegatinas y plásticos protectores por buena parte de sus paneles.
Historia del Tesla Roadster
Para hablar del nacimiento del Tesla Roadster nos tenemos que remontar hasta el 2008. Fue el primer ‘hijo’ automotriz del magnate Elon Musk. Este descapotable sirvió para sentar las bases de todo lo que vendría unos años más adelante y que en la actualidad se tasa con precios que entonces eran impensables.
La vida de este coche eléctrico fue relativamente corta porque su fabricación sólo duró tres años (del 2008 al 2011). Ese hecho provocó que tan sólo se produjeran 2.000 ejemplares, con lo que hoy en día está siendo un modelo perseguido por los fanáticos de la marca y eleva su cotización en el mercado de segunda mano.