Aston Martin comenzó a despedirse del DBS Superleggera el año pasado, cuando presentó el DBS 770 Ultimate, una edición especial del supercar inglés que llevaba su motor V12 biturbo hasta los 770 CV y contaba con detalles de diseño específicos.
Unos meses después, los de Gaydon dan el último adiós al DBS con la variante descapotable de esta serie exclusiva. Se llama Aston Martin DBS 770 Ultimate Volante y será todavía más especial que el coupé porque se fabricarán menos unidades.
Casi 800 CV a cielo abierto
Más de una década después, en 2018, el apellido DBS volvió al catálogo de la firma inglesa de la mano de un supercar más radical que también recurría a un motor V12 biturbo y estaba disponible con carrocería coupé y descapotable: el DBS Superleggera.
Desde entonces, Aston Martin ha lanzado varias ediciones especiales del DBS Superleggera, algunas inspiradas en James Bond, como el DBS Superleggera OHMSS (On Her Majesty’s Secret Service) o el DBS Superleggera 007 Edition del que solo se fabricaron 25 unidades.
Se llama Aston Martin DBS 770 Ultimate Volante y copia la receta del coupé, pero a cielo abierto y con una producción más limitada, puesto que solo se fabricarán 199 unidades, mientras que el DBS 770 Ultimate Coupé habrá 299 ejemplares. Por supuesto, toda la producción de ambos modelos ya está vendida.
De la misma forma que el coupé, el Volante utiliza una versión potenciada del motor V12 de 5.2 litros biturbo de la marca británica. Gracias a una mayor presión de los turbos y a la modificación del sistema de admisión, este bloque desarrolla 770 CV y 900 Nm de par.
Semejantes cifras convierten a esta edición especial en el Aston Martin DBS descapotable más potente de la historia. El Aston Martin a cielo abierto más potente sigue siendo el Vakyrie Spider.
La mecánica de doce cilindros se asocia a una caja de cambios automática ZF de ocho marchas y manda toda la potencia al eje trasero, que cuenta con diferencial autoblocante para digerir los casi 800 CV de potencia. Como resultado, el DBS 770 Ultimate Volante acelera de 0 a 100 km/h en 3,6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 340 km/h.
En cuanto a la puesta a punto, es idéntica a la del Coupé: frenos carbocerámicos, un chasis todavía más rígido y suspensión, transmisión y dirección específicamente calibradas para este modelo.
A nivel estético, la división Q by Aston Martin ha conseguido diferenciar esta versión del DBS Superleggera Volante por los múltiples detalles en fibra de carbono y las llantas de 21 pulgadas inspiradas en las del radical Aston Martin Victor, un one-off de 848 CV que vio la luz hace tres años.
Por dentro incorpora una placa identificativa con el número de cada unidad y equipamiento exclusivo, como los asientos de tipo baquet Sport Plus con estructura de fibra de carbono o el nombre de esta serie especial grabado en el reposabrazos central y los umbrales de las puertas.
Como no podía ser de otra manera, Q by Aston Martin ofrece la posibilidad de personalizar su coche a cada cliente. Los primeros que lo encargaron tendrán que esperar hasta finales de año para disfrutar de su coche y puede que sean los últimos en estrenar un Aston Martin con motor V12, aunque visto lo visto con el Lamborghini Revuelto, puede que los de Gaydon también se animen a utilizar otro V12 en el próximo DBS.
